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miércoles, abril 20, 2011

La Pascua Católica: entre lo absurdo y lo sublime


La Iglesia Católica pierde adeptos día a día. Existen muchas razones para explicar este fenómeno, pero hay dos que deben justificar gran parte de este asunto por lo inverosímiles que resultan: la resurrección de Jesús y la virginidad de su madre.


 Estos dos “cuentos” que van en contra de toda lógica y de toda ciencia, desacreditan por completo la prédica del potente mensaje  SIMBÓLICO que ambos encierran.

Empecemos por el nacimiento de Jesús. Se nos dice que nació por “la gracia del Espíritu Santo”, que María, su madre, no tuvo sexo con su marido, sino que la “semillita” se la puso Dios. Esto no lo cree ni un niño de 6 años, quien ya a esa edad  juega con muñecos didácticos con “pitito” y “pancita”, para que vaya sabiendo que él, como todos los demás niños, no los trajo la Cigüeña ni salieron de adentro de un repollo.

Al recurrir a estas historias, la Iglesia destruye el hermoso mensaje simbólico que encierran: la capacidad del ser humano de crear con sus propios pensamientos, deseos yl amor, así como la capacidad de superar adversidades, "renaciendo" de las cenizas como el Ave Fénix.

Mi interpretación simbólica es la siguiente: María y José tenían tantos deseos de tener un hijo, tanto pensaron y tanto amaron a esa criatura, que sus solos pensamientos lograron crear el hijo que ambos anhelaban, sin necesidad del trabajo físico (en este caso el acto sexual), sino a puro trabajo mental.

Hoy que está de moda el Libro El Secreto y la Ley de Atracción, podemos ver cómo desde los tiempos de Hermes Trimegisto se menciona el poder de los pensamientos POSITIVOS para crear o atraer objetos materiales en el mundo real. De hecho, la creación tiene dos momentos: uno mental y otro material. El Arquitecto primero crea una imagen mental del edificio a construir, luego traza los planos y por último comienza a poner la primera piedra.

Cuando esa idea está clara en la mente del hombre y le agrega su voluntad y pasión, el Universo se alinea de tal manera que la transforma en realidad. El rezo, en definitiva, es un pedido al Universo para que éste se confabule a nuestro favor y así las cosas se vayan logrando sin mayor esfuerzo. Hoy la ciencia lo explica con la física cuántica.

En el otro extremo de la vida, la muerte. Y luego de la muerte, la resurrección. Un hecho que científica y biológicamente sólo lo logró el Dr. Frankenstein gracias a la magia de Hollywood; y hasta el mismo niño de 6 años (que no se creyó lo del embarazo sin sexo), tampoco cree en “El Hombre que volvió de la muerte”, recordada serie de Narciso Ibáñez Menta.

En cambio el SIMBOLISMO de la resurrección es realmente muy potente y válido. Las personas morimos varias veces durante nuestras vidas: mueren nuestras relaciones de pareja y resucitamos con una nueva, morimos al perder un trabajo y resucitamos con otro aún mejor.

La capacidad de terminar una etapa y comenzar otra, con una “nueva vida”, es esencial para el bienestar del ser humano. Y esta actividad no tiene nada de “divina”, ni es sólo para el hijo de Dios; es para todos los mortales. Dice Paulo Coelho: “Siempre es necesario saber cuándo se acaba una etapa de la vida. Si insistes en permanecer en ella, más allá del tiempo necesario, pierdes la alegría y el sentido del resto. Cerrando círculos, o cerrando puertas o cerrando capítulos; como quieras llamarlo. Lo importante es poder cerrarlos, dejar ir momentos de la vida que se van clausurando”.

Me parece que sería mucho más positivo que la Iglesia se focalizara en el simbolismo de la Resurrección y que no siga insistiendo con la resurrección per sé. Es mucho mejor ver a Jesús como un HOMBRE, con facultades personales excepcionales –y también con sus debilidades – en vez de verlo como un ser extraterrestre, que nace sin la intervención de un padre y que puede resucitar como un monstruo de película.

Además la celebración de las Pascuas no es de origen religioso sino secular. La palabra "Pascua" viene del nombre anglosajón de una diosa que personificaba la primavera. Fue esta fiesta pre-cristiana la que nos dio el Conejo de Pascua (un símbolo de la fertilidad) y los huevos de Pascua, cuyas marcas brillantes representan los colores de la salida del sol. La Pascua original celebraba el regreso del calor, de la luz solar, y de las hojas verdes después de un largo invierno. Era una celebración de la alegría de vivir en la tierra. En cambio la Pascua cristiana es una fecha para recordar el sufrimiento y el auto-sacrificio. Totalmente lo opuesto.

Por eso las Pascuas están entre lo absurdo y lo sublime. Lo absurdo de creer en actos totalmente contrarios a la razón y lo sublime de trasmitir un mensaje simbólico para la elevación y superación del ser humano, sea cual sea su condición y sin necesidad de contar con dones sobrenaturales.

Sería mucho más coherente que la Iglesia nos intentara convencer de las bondades de su prédica apelando al uso de nuestras mentes y no de nuestros miedos irracionales. Después de todo, si Dios le puso mente al hombre fue para que la use, no para que la anule con misticismos, falacias y fetiches.

Guillermo Sicardi

6 comentarios:

Anónimo dijo...

triste post.
Sigo bastante lo que escribís, y generalmente tiene sentido, pero no le encuentro el sentido a cargártelas contra el Credo de una religión, aunque no la compartas.

Triste también que (según entiendo) mandes a tus hijos a un colegio católico si no compartís esas creencias.

Dr. Guillermo Sicardi, MBA dijo...

Estimado anónimo,
Lo triste es que no te identifiques y mas triste aún es que no tengas ningún argumento racional para rebatirme.
Si lees bien la nota verás que no cargo contra el credo ni contra la religión, sino contra el absurdo de defender lo indefendible.
La religión católica, sus preceptos y valores que comparto en gran parte, serían mucho más creibles si argumentaran estas sandeces.
La esencia del simbolismo queda menguada por la sinrazón. Y eso le hace mucho mal a tu religión.

Mis hijos van a un Colegio que brinda enseñanza católica, pero no la exigen como obligatoria ni les lavan la cabeza. En el resto es bastante buen colegio, aunque lamentablemente no tengo manera de evaluarlo objetivamente ya que en este país no hay ninguna prueba ni evaluación que permita saber si el Christian es mejor que el Elbio.

Pero algún día habrá más objetivismo y menos misticismo, aun para elegir un colegio.

Anónimo dijo...

Googleá el Credo de la Iglesia Católica, leelo, y verás por qué digo que lo estás atacando.

Sobre los simbolismos, toda religión los tiene. No tienen que ser racionales, son simbolismos, y creo que funcionan.

Pero el punto es que sería bueno que respetes lo que creemos los demás. Tal vez en vez de atacar las creencias, podrías fijarte en los hechos y ahí si, hay cosas para mejorar. Como en toda organización, hay quien hace las cosas bien y quien no, hay buenos líderes (Juan Pablo II, a quien beatificaron hoy, es un gran ejemplo) y otros no tanto.

Por último, creo que te falta un poco de humildad. Estás frente a una organización con más de 2000 años y con millones de integrantes en todo el mundo.

Tal vez deberías conocer un poco más.Pero tal vez esa es tu especialidad, plantear cambios en organizaciones de las que conocés poco o nada. Por algo no durás mucho en ninguna de las que has colaborado, y ninguna ha pegado un gran salto luego de tu "resultoria".
Si fueras tan bueno como te crees, tendrías una empresa con sensiblemente mayor éxito.

Lo del anonimato, vos decis lo que querés, yo me callo lo que quiero.

Dr. Guillermo Sicardi, MBA dijo...

Anónimo,

Justamente es lo que tú dices: "Sobre los simbolismos, toda religión los tiene" y eso me parece notable.

Se ve que no entendiste un ápice de mi artículo, ya que lo que sostengo es que sería muy positivo para todos que la Iglesia defendeira el SIMBOLISMO de la resurrección y el SIMBOLISMO del embarazo sin sexo, pero que no defienda el hecho en sí mismo.

Por otra parte, el hecho que la Iglesia tenga 2000 años no la hace mejor ni buena. Su prédica se ha basado en el miedo (miedo a ir al infierno) y a amenzarnos con cosas terribles (todas incomprobables racionalmente) si no seguimos sus preceptos.

Y vaya que estas amenazas se hicieron reales durante la Inquisición, etapa nefasta que vivió la Iglesia y que demoró nada menos que 400 años en pedir disculpas.

Esto es propio del fanatismo religioso y del deseo del ser humano de renunciar a su propia responsabilidad de conducir su vida. ¿Sabías que el 75% de los urugayos creen que sus problemas son por culpa ajena? ¿Y que el 80% prefieren recibir ordenes a tener espacio para actuar?

Por eso toda propuesta que libere al individuo de culpa propia, será bienvenida.

Si tu quieres creer en estas cosas, allá tú. También los egipcios (pueblo muy intelignete y racional) le asignaba un dios a cada evento de la naturaleza que no podían comprender. A medida que la ciencia avanza, los misticismos y fetichismos retroceden.

POr suerte la Inquisición terminó y no eres musulmana, porque es muy probable que tu agresión verbal hacia mí, es probable la traduzcas en violencia física.

¿dónde quedó aquello de poner la otra mejilla?

bueno. voy a seguir tu consejo y ver cómo ser más "exitoso". Si no se me ocurre nada tal vez prenda unas velas y me encomiende no a uno sino a todos los dioses del universo. Tengo fé que funcionará.


PD. Yo utilizo mucho el simbolismo en mi vida. De hecho tengo mi escritorio lleno de simbolos. Pero no creo que prendiendo velas logre nada. Lo que logro es concentrarme, focalizarme y conocerme más a mi mismo. El simbolismo me ayuda a usar la mente, no a anularla. Esa es la diferencia de nuestros enfoques.

dunk homme dijo...
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Anónimo dijo...

No entiendo el objetivo de este articulo.